CampAgs 2016

Nos encanta viajar, y visitar un grupo siempre es interesante: puedes encontrar cosas nuevas para intentar en tu Provincia o enseñarle a tu Grupo, hacer amigos, conocer lugares en los que no habías estado antes y competir con personas que tienen diferentes formas de trabajo.

El CampAgs de este año fue entretenido, pero en mi opinión, el del año anterior fue mejor, ya que había más actividades y competencias que este año en general. Sin embargo, las competencias en las que participamos fueron bastante reñidas, vimos equipos muy buenos con gran destreza para todo (¡todo!).

Nuestra Comunidad se dividió en dos equipos, Escorpiones/Bulldog y Orión, que fueron los participantes en construcción de torres, guerra de catapultas, en alta cocina y en el triatlón. Días antes del campamento nos preparamos, hicimos fichas técnicas de las construcciones y del menú (que afortunadamente guardamos en un folder de plástico).

La torre del equipo Escorpiones/Bulldog era una torre Eiffel (aunque no lo pareciera tanto), con tejidos para las plataformas y como decoración, y, en lo más alto de la torre, sobre un asta, los calzones de escorpión de mi Coordinador.

El equipo de Orión hizo una torre con escalera en forma de caracol, muy original, aunque algo inestable porque se movía mucho, pero ninguna de las torres se le parecía y fue toda una hazaña construirla, créanme que no entiendo cómo pudieron armarla sin haberse caído; aunque nada supera la torre que estaba en la otra esquina del campamento: 4 bambúes de entre 4 y 5 metros de altura, al principio se sacudía con el viento y con cada movimiento que hacían, pero cuando la terminaron quedó más fija que varias de las torres que usaron sólo polines; una estructura impresionante, desafortunadamente no sé quiénes la construyeron, sólo sé que fue un equipo de Comunidad de la Provincia Aguascalientes.

El segundo día fue la guerra de catapultas después de la revisión, nuestras fichas estuvieron intactas después de dejarlas en el piso junto a la torre gracias al folder en el que las habíamos guardado. Para las catapultas, Escorpiones hizo una pequeña, pero disparaba bastante bien y no requería mucho esfuerzo para poder moverla; Orión había hecho un diseño mucho más complicado que incluía un resorte, era una buena idea, pero el resorte no era el indicado y no funcionó muy bien.

El concurso de alta cocina fue alrededor de una alberca. Nos dijeron que sólo podían cocinar dos personas y que cada equipo tenía una mesa, pero nosotros cocinamos de manera express, porque se suponía que sólo disponíamos de una hora para cocinar los tres tiempos, también fuimos un desastre porque había trastes en el piso, la salsa estaba junto al tobogán, la sopa de tortilla estaba en una silla, tenía perdido un tenedor y todo estaba regado y todo porque no teníamos mesa. Al final, el menú quedó bastante bien a pesar de que sólo quedó medio vaso de agua de tuna, el filete sobre salsa de chile morita estaba ya algo frío y nuestro postre "mousse de frutos rojos", o mejor dicho "manzanas con crema", estaba muy rico.

Para el triatlón, una persona hacía un recorrido en bici, otra corría y una última daba varias vueltas a la alberca, fue al final del campamento por lo que ya estábamos algo cansados y hacía mucho calor, los que no participaron empezaron a levantar el campamento para irnos después de la premiación y clausura.

El parche de este año me encantó, una casa de campaña bajo las estrellas. Una idea simple, pero con un buen diseño y que dice mucho (ya sabes, scouts, aire libre, acampar).

En fin, fue un campamento con mucha competencia, vimos construcciones nuevas, diferentes. Como es otra provincia, manejan ciertas cosas de manera distinta a la nuestra, lo que es muestra de diversidad (y a veces también es confuso), son personas amables y caritativas (nos dieron las manzanas para nuestro postre), y siempre es lindo volver, más aún si haces amigos, sean muchos o pocos. Esperamos seguir recibiendo invitaciones al CampAgs y a participar en más retos así.

Nur D. de León Torres